Título: It Had to Be YouAutor: Susan Elizabeth Phillips
Serie: Chicago Stars #1
Editorial: Vergara
Idioma original: Ingles
Fecha de publicación: 1 de febrero 2008
La ciudad del viento no está preparada para Phoebe Somerville, la moderna, estrafalaria, curvilínea y despampanante mujer que acaba de heredar el equipo de fútbol americano de los Chicago Stars. Y Phoebe no está en absoluto preparada para el entrenador jefe de los Stars, Dan Calebow, una ex estrella del fútbol oriundo de Alabama y un salvaje rubio.
Calebow es todo cuanto Phoebe aborrece, un deportista sexista y marimandón con una sola neurona en el cerebro. La hermosa nueva jefa es todo cuanto Dan desprecia, una entrometida muñequita que no sabe distinguir una escoba del montículo del pitcher. Así que, ¿por qué se siente tan irresistiblemente atraído por esta sensual gatita como si fuera un misil por infrarrojos? ¿Y por qué el encanto de niño bueno de Dan hace que la cosmopolita Phoebe se sienta torpe, incapaz de hablar y asustada?
Mi opinión...
Sin lugar a dudas, Susan Elizabeth Phillips es de las mejores escritoras en romántica contemporánea que he leído nunca, y que no me canso de leer una y otra vez. Creo que el primer libro que leí de ella fue este mismo –hará unos cuatro años de eso- y como me sucedió aquella vez, no pude poner el libro abajo hasta no terminar –a pesar de saber cómo terminaría todo.
Y es que Phoebe y Dan son de esas parejas que yo amo leer. Esas que se pelean de principio a fin, pero que terminan perdidamente enamoradas. Todo su tira y afloja, con esos diálogos, reclamos, indirectas y comentarios ofensivos que me hacían reír, lograban que me resultara impensable abandonar la lectura o alejarme. Sin mencionar esa forma de narrar que tiene SEP, tan simple y a la vez complicada, con la que se disfruta mucho sin importar cuantas veces la hayas leído antes.
Señorita Somerville, no nos conocemos, pero necesito que me golpee el trasero.
Phoebe es una chica acostumbrada a usar su cuerpo como arma de defensa, asustada de tratar con hombres rudos y fuertes, no sabe precisamente bajo que piedra esconderse cuando su padre muerto, como última oportunidad de controlarla, la deja a cargo de un equipo de futbol americano, más su entrenador, para que se las arregle por unos meses. Dan por su parte, esta hastiado de las mujeres como Phoebe, y solo busca paz y tranquilidad junto a una mujer normal, que sea tierna y cariñosa, con la que pueda envejecer y tener hijos, además de seguir siendo un entrenador de un deporte que lo es todo para él. Desde el comienzo su relación no es fácil, pero todo empeora cuando Phoebe decide abandonar a su equipo unos días, y regresa comportándose como una rubia tonta sin cerebro, haciendo que él decida no sentir ningún tipo de respeto por ella. La cosa es que, aunque a ninguno le haga mucha gracia, ella sigue siendo su Jefa, y tiene que soportar verla casi a todas horas del día le guste o no.
Lo que encuentro interesante, es que ambos están atascados en esta convivencia rara, en donde cada uno oculta un pasado difícil, y se pone una máscara o asume un papel para enfrentarse al otro. Lo que resulta ser casi, casi, sinónimo de drama… ¡y yo amo el drama! Por lo que en ese sentido, la historia no decepciona en lo absoluto. Tal vez lo que sí que me decepcionó un poco, fue el darme cuenta de que en esta oportunidad, el romance no logró cortarme la respiración como la primera vez. En esta ocasión me pareció un tanto cursi y empalagoso, sin mencionar algo apresurado, y predecible. Con esto no digo que no me haya gustado –nada más lejos de la realidad- pero ahora hay pequeños detalles que considero importantes, y que afectan un poco el cómo me llega una historia, y hace algunos años, estos no me importaban tanto.
—He jugado duro toda mi vida, pero siempre he jugado limpio, no importa cuánto me tienten. Me han ofrecido dinero. Me han ofrecido drogas y mujeres. Pero nunca tiro la toalla. Por nadie. Ni siquiera por ti.
A pesar de todo, SEP sigue siendo de esas escritoras que encabezan mi lista de favoritas, pues solo ella es capaz de escribir un libro en donde todo gira alrededor de un deporte –futbol americano en este caso- y hacer que una persona como yo, a la que no le interesan los deportes de ningún tipo, se pueda sentir cómoda leyendo acerca de ello, y sobre todo, llegue a emocionarse y comprender –superficialmente- de que va todo. Me alegra mucho saber que se documentó tan bien para poder escribir todos estos libros, pues su dominio del tema resulta evidente en cada descripción.
Desde Bert hasta Pooh, todos los personajes cautivan e interesan de principio a fin, resaltando a unos cuantos, como Bobby Tom –cuya historia amo con todo el corazón- o Molly, quienes resultaban ser a veces tan interesantes como los mismos protagonistas.
En definitiva, una historia, una saga y una escritora completamente recomendables para cualquier gusto y ocasión.
(4.5)
