Autor: Sophie Kinsella
Serie: Tomo único
Editorial: The Dial Press
Idioma original: Ingles
Fecha de publicación: 14 de febrero 2012
Lo he perdido :-( Lo único que se suponía que no debía perder. Mi anillo de compromiso. Ha estado en la familia de Magnus desde hacía tres generaciones. Y ahora, el mismo día en que vienen sus padres, lo he perdido. ¡El mismo día! No hiperventiles, Poppy. ¡¡¡Sé positiva :)!!!
Poppy Wyatt nunca se había sentido más afortunada. Está a punto de casarse con su hombre ideal, Magnus Tavish, pero en una sola tarde, su cuento de hadas comienza a desmoronarse. No solo ha perdido el anillo de compromiso durante un simulacro de incendio de un hotel, sino que en medio del pánico posterior, le robaron el móvil. Mientras deambula por el vestíbulo con las piernas temblorosas, divisa un teléfono abandonado en una papelera. ¡Quien lo encuentra se lo queda! Ahora podría dejar un número para que el hotel contactase con ella cuando encontrara su anillo. ¡Perfecto!
Bueno, sería perfecto de no ser porque el dueño del teléfono, el ejecutivo Sam Roxton, no está de acuerdo. Quiere recuperar su teléfono y no le hacer gracia que Poppy lea sus mensajes e invada su vida privada.
Lo que sigue es una hilarante e impredecible giro de los acontecimientos mientras Poppy y Sam ven como cada uno pone en entredicho la vida del otro a través de emails y mensajes de texto. Mientras Poppy hace malabarismos con los preparativos de la boda, unas misteriosas llamadas de teléfono y oculta su mano izquierda a Magnus y a los padres de este… no tarda en darse cuenta de que está a punto de llevarse la mayor sorpresa de su vida.
Mi opinión...
Esta historia me recordó porque solía devorar libros de chick lit. Siendo el primero que leía de la autora, y viendo la cantidad de buenas opiniones que esta mujer ha ido acumulando a lo largo de los años, estaba ansiosa por probar su pluma, y verificar de primera mano si era tan buena como decían. Resulto que era mejor ^^
Y no, no es solo porque es una historia ligera y entretenida –que lo es- sino porque sus personajes son seres con los que me puedo relacionar, a los que puedo entender y con los que simpatizo bastante. Absolutamente todos me transmitieron una emoción, y me hicieron sentir como parte de la historia –lo cual agradezco mucho.
—¡No es un “Por supuesto”! ¿Cómo exactamente terminaron? ¿Te sentaste y tuviste una charla como se debe con ella?
Hay silencio. Sam está evitando mi mirada. Por supuesto que no se sentó a tener una charla como se debe con ella. Lo sé. Probablemente le envió un mensaje corto, diciendo, Se acabo. Sam.
Las personalidades de ambos protagonistas están muy bien perfiladas, y a pesar de todos sus defectos individuales –y de esos breves momentos en donde quieres estrellar a Poppy contra una pared, solo para tratar de meterle un poco de razón a la chica– en verdad sientes como se complementan el uno al otro, sin ser de esas parejas sosas, que están juntas solo porque la autora dice que así debe ser.
Su romance fue original y sumamente entretenido. Pero lo que de verdad logró convencerme de la genialidad de la autora, es la manera en la que le fue dando forma a todo: sin prisas y con calma –a pesar de que toda la acción tiene lugar en unos cuantos días.
Nuestros protagonistas pasaron de ser extraños, a estar completamente unidos por una situación que resulta ser de lo más vinculante: compartir un teléfono. De repente, sus mensajes y correos dejaron de ser privados, y poco a poco se fueron haciendo más cercanos. Claro que tienen que pasar por muchos malentendidos –no seria chick lit si no fuera el caso– para poder llegar a ese tan anhelado final, pero cada una de esas situaciones vale la pena –es uno de esos libros en donde o te ríes, o te ríes.
Un silencio, y después el teléfono suena otra vez con su respuesta:
:)
La miro con incredulidad. Una carita sonriendo. ¡Sam Roxton escribió una carita sonriendo! Un momento después, envía otro:
Lo sé. Tampoco puedo creerlo.
Me ha encantado la forma que tiene la autora de narrar esta historia –desde el punto de vista de Poppy– sin relleno y directa al punto. Tal vez mi única pega esta en el largo de los capítulos, que al ser tan extensos –casi todos abarcan más de treinta hojas– hace que a veces la lectura se sienta un poco lenta, y tengas esa sensación desesperante de no estar avanzando, ni moviéndote. Pero nuevamente, una vez te metes de lleno en la historia, deja de ser un problema –la mayoría de las veces.
Sophie Kinsella es una de esas autoras que me hace arrepentirme de no haberlas leído antes. Sus personajes son de esos que se sienten reales, que evolucionan, y que hacen que de alguna extraña manera, llegues a sentirte orgullosa de sus logros. Las situaciones a las que se enfrentan son hilarantes –por decir poco- y su humor es como el que me gusta; un poco sutil, sin llegar a ser chabacano.
Definitivamente, una historia original y divertida, que deja un muy buen sabor de boca, perfecta para una tarde de ocio. Una historia que no deben perderse!
Como información adicional, he de decir que saldrá en español a comienzos de junio de este año -puede que un poco antes- bajo el brazo de Random House Mondadori, y con el nombre de "Tengo tu numero".
Otras portadas...
Parece divertido ^^
ResponderEliminarA ver si lo leo cuando salga en español
Besos!
A mí me gustó tanto como a ti :) En general, yo adoro todas los libros de Sophie Kinsella ¡es una autora que debes leer a como dé lugar si te gusta el chic-lit!
ResponderEliminarGracias por la reseña, un besote