Autor: Alice Clayton
Serie: Cocktail #1
Editorial: Cisne
Idioma original: Ingles
Fecha de publicación: ingles: 27 de noviembre 2012
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★ ★ ★ ★ ★
Caroline se acaba de mudar a San Francisco. Ha alquilado un piso donde vive con su gato Clive, y ha empezado a trabajar como diseñadora de interiores. Su nueva y excitante vida también incluye a Simon, un vecino algo peculiar, y unas paredes que parecen papel de fumar. Noche tras noche, el mujeriego, como Caroline suele llamarle, la despierta con ruidos escandalosos... No oye únicamente su cama golpeando rítmicamente la pared que separa las dos habitaciones sino también los gritos de éxtasis de sus acompañantes. Pero lo peor de todo es que esta situación no hace más que recordarle que está en dique seco.
Una noche, después de una sesión particularmente ruidosa, Caroline decide tomar cartas en el asunto y quejarse. Pero no esperaba sentirse atraída por Simon. Cuando abre la puerta y ve que solo lleva una sábana blanca alrededor de su cintura, lo encuentra delicioso e irresitible. Pronto las fantasías protagonizadas por este misterioso semental es lo que la mantendrán en vilo.
Caroline y Simon volverán a encontrarse en una fiesta donde, por fin, podrán hablar en una situación normal. Él resulta ser bastante encantador, y nada tiene que ver con el gigoló que Caroline se había imaginado. Incluso podrían llegar a ser buenos amigos... O quizás algo más.
He estado leyendo en facebook pequeñas escenas entre los protagonistas de este libro y la verdad es que me dejaron lo suficientemente intrigada como para querer empezarlo –finalmente-. Solo sabía que era otro libro erótico en la larga lista de libros eróticos que precedieron al éxito de Christian Grey y sus famosas sombras… aunque por supuesto, me equivocaría completamente si dijera que este libro tiene alguna similitud con los demás.
—¿Por qué tienes que ser un mujeriego imbécil? —Le pregunté, mi cara a pulgadas de la suya.
—¿Por qué tienes que ser una mojigata bloquea pollas? —Me preguntó, y cuando abrí mi boca para decirle exactamente lo que pensaba, el maldito me besó.
Caroline es una mujer inteligente, independiente y divertida, además de ser una diseñadora exitosa a la que le encanta su trabajo. Un día, se muda a este apartamento recomendado por su jefa y descubre que su nuevo vecino –con quien comparte la pared de la habitación- tiene hábitos nocturnos muy… ruidosos –que involucran a distintas mujeres, y los cuales no le permiten dormir. Solo es cuestión de tiempo para que decida ir a reclamarle y entonces empiece la verdadera historia.
Wallbanger fue un libro muchísimo más tierno y divertido de lo que esperaba. Por primera vez en nunca la relación de los protagonistas no se cimento en el aspecto físico y la química en la cama, sino que en su lugar los protagonistas llegaron a conocerse primero, a hacerse amigos y aceptarse con defectos y todo.
Caroline fue una protagonista con quien simpatice muchísimo. Es una mujer fuerte, independiente, con un sentido del humor espectacular -amé ese habito suyo de nombrar las partes de su cuerpo- con quien es imposible llevarse mal. Vive con su gato Clive -otro de mis personajes favoritos- y definitivamente será la indicada para hacerle frente a la grosería de Simon.
—No te puedes mudar a los suburbios. ¿Quién horneará para mí?
—Pfft, solo quieres verme en delantal.
—No tienes idea —dijo, guiñándome un ojo.
Simon por su parte me gustó también, aunque siento que individualmente queda opacado por la genialidad de Caroline. Sí, es un hombre dulce y sí, verlo confundido y después actuando como un idiota porque sencillamente se encuentra demasiado abrumado por sus sentimientos es un poema, pero muchas veces sentí que no me interesaba tanto su vida. Aunque inicialmente no me gustaba ese habito suyo de acostarse con distintas mujeres -aunque extrañamente, no es un mujeriego- me tenía esperando ansiosa el momento en que las mandará a volar y se decidiera por estar con Caroline.
Eso sí, ambos siendo una pareja son lo mejor del mundo. Amé, adoré con toda mi alma cada una de sus interacciones. Todas esas conversaciones tan llenas de humor en la que mezclaban comida y doble sentido, todos sus mensajes de texto... En fin, cada instante que pasaban juntos me tenían riendo encantada.
Los personajes secundarios juegan un papel si bien no importante para el desarrollo de la trama, definitivamente entretenido. Tal vez su propósito haya sido facilitar ciertos momentos Caroline/Simon, pero de que te entretienes con su mal entendido amoroso te entretienes.
¿Terminaste de trabajar?
Sep, estoy en casa esperándote.
Ahora, esa es una bonita imagen…
Prepárate, estoy sacando un pan del horno.
No juegues conmigo, mujer… zucchini?
Naranja de arándano. Mmmm…
Ninguna mujer ha hecho pan de desayuno para estimularme de la manera en que lo haces.
Ja! ¿Cuando vienes?
No puedo. Conduzco. Recto.
Podemos tener una conversación en la que no tengas doce?
Lo siento, llegaré en 30.
Perfecto, eso me da tiempo para glasear mis rollos.
Discúlpame?
Oh, no te lo dije? También hice rollos de canela.
Estoy allí en 25.
La pluma de la autora es lo mejor del mundo. Siento que fácilmente podría ser mejor amiga de la señora porque su sentido del humor y el mío son muuuuy afines. Si no me tenía riendo me tenía sonriendo, pero indiferente no me dejaba.
En general es un libro gracioso que recomiendo a todos aquellos que quieran pasar un buen rato de risa. Está narrado de una manera fresca y divertida, además de tener un romance que empieza de forma natural y no se concentra exclusivamente en el plano físico -solo por eso lo leería-. El humor de la autora es hilarante y definitivamente la historia de la mujer que esta por allí buscando su O perdida, los tendrá pegados a sus páginas sin ganas de querer soltarlo.
Hoola!
ResponderEliminarTengo este libro agregado a mi lista de libros por leer desde hace un rato porque todos comentan lo agradable y divertido que es... yo creo que va siendo hora de que me ponga con él jajaja
Un abrazo♥