
Después de un eterno mes leyendo este libro, ¡¡FINALMENTE lo he terminado!!

Gran novela escrita por la novelista inglesa, Charlotte Brontë. Publicada en 1847, con la cuál consiguió gran popularidad, encumbrando a la autora como una de las mejores novelistas románticas, y es hoy considerada un clásico de la literatura en lengua inglesa.
Yo tenía expectativas muy altas con este clásico, porque siempre he escuchado muy buenas opiniones de él -y lleva en mi lista de pendientes desde hace demasiado tiempo- sin embargo, esperaba disfrutarlo más de lo que lo hice.
Mi principal -y probablemente único- problema con este libro es que fue una historia muchísimo más tediosa y lenta de leer de lo que esperaba -por esto demoré tanto tratando de terminarla-. Inicia contándonos la vida de nuestra protagonista, Jane Eyre, siendo apenas una niña huérfana que sufre los maltratos de su familia adoptiva, para después narrarnos los devenires que va sufriendo su vida a medida que va creciendo, y termina siendo institutriz de una pequeña, en casa del arisco Mr. Rochester.
Aunque todo el mundo te odiase, mientras tu conciencia estuviese tranquila, nunca, créelo, te faltarían amigos.
Nada más adentrarnos en la historia, nos encontramos con un ambiente bastante oscuro y lúgubre, con una niña sola, rodeada de personas que solo se encargan de maltratarla de todas las maneras posibles. Y aunque entiendo que esto era necesario para ponernos en contexto con el personaje -poder entender su personalidad, su forma de actuar… básicamente poder acércanos a la mente de Jane- a mí me resultó bastante denso y complejo de seguir. Sí, la vida de Jane es difícil y muchas veces sientes lastima por todas las injusticias cometidas hacia ella, pero supongo que tantas tragedias juntas me aburrieron un poco e hicieron que me costara bastante meterme de lleno en la historia.
Cuando finalmente Mr. Rochester hace su aparición, la cosa mejora un poco porque entre ellos se da una relación bastante interesante, con unos matices dramáticos que me han gustado mucho. Sus conversaciones, sus interacciones… todo me ha parecido bastante bien hilvanado, profundo y atrayente.
Soy un ser humano libre con voluntad propia y la uso para dejarle.
Creo que mi desilusión con la historia se debe a que a pesar de tener unos personajes poco convencionales, imperfectos y llenos de detalles que los hacen únicos, no lograron conquistarme del todo. Si bien es cierto que Jane es una mujer fuerte con un espíritu independiente para la época -al que admiré-, a veces las adversidades por las que pasaba y su comportamiento debido a ellas me abrumaban un poco, y hacían que no pudiera amarla de la manera en la que esperaba -en otras palabras, me ha gustado que fuera un personaje tan fiel a sí mismo y a sus convicciones, pero no he tomado de la misma manera las situaciones en donde actuaba siguiendo su espíritu de mártir sacrificada…
Sin embargo, sí que puedo decir que entiendo la razón por la que este libro es considerado un clásico. La ambientación, el estilo, los personajes… todos fueron construidos de una manera impecable -por eso lamento mucho no haberme llevado tan bien con el ritmo-. A estas alturas es considerado por muchos como una lectura obligatoria, por lo que los animo a que le den una oportunidad… puede que les resulte más sencillo de seguir que a mí.